En este artículo me dispongo a explicar diferentes formas de subrayado, que pueden ser utilizadas a la hora de subrayar el temario a estudiar. Estas formas de subrayado pueden combinarse a fin de realizar un subrayado más preciso y visual que nos permita posteriormente clasificar y hacer uso de esta información más fácilmente.
Así podemos subrayar en forma de líneas rectas, situadas debajo de la información considerada importante. Esta es la forma más común de subrayado, y puede ser eficaz, pero complementándola con otras formas de subrayado podemos explotar el potencial de esta forma,
Una forma de extrema utilidad a la hora de subrayar una gran cantidad de información, como puede ser un párrafo, puede ser remarcar entre paréntesis este párrafo, a fin de evitar cargar la información con las lineas subrayadas.
Otra forma, que puede ir complementando a la citada anteriormente es la del tachado, que consiste en tachar información, una información que puede haber sido subrayada por error, o que ha sido considerada no relevante tras un repaso (por ello es importante leer la información a subrayar anteriormente).
Las otras formas que pueden ser de utilidad son el redondeado y el recuadrado, que consisten en resaltar una cantidad de información BREVE sobre el resto, como pueden ser fechas o términos concretos. Estas dos formas de subrayado permiten ver de forma más visual la información.